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domingo, 21 de diciembre de 2025

Todo era mentira

 

El impulso le llevó a visitar a su amigo para contarle lo que le ocurría desde hacía algún tiempo. Se vio envuelto en un escándalo del que no podía salir tan fácilmente. Se sentía atrapado entre las garras de aquella situación tan difícil de manejar y aceptar.


Cada vez que llegaba a casa, su sentimiento era como escuchar un trueno de repente en medio de la oscuridad. Su mujer no podía aceptar todo aquello que estaba pasando, y en cuanto aparecía su marido, ella reaccionaba como un globo cuando está a punto de estallar. Y explotaba, exteriorizando todo lo que tenía dentro.



Todo era mentira. Él no estaba involucrado en nada escandaloso ni provocador. La justicia tendría la última palabra.


Cómo un hombre que durante toda su vida había llevado una vida modélica y ejemplar habría podido verse enredado cual insecto en manos de una tela de araña.


Todo lo ocurrido estaba siendo modelado en el borrador de su último relato.


Teresa Ribello


domingo, 14 de diciembre de 2025

La sentencia

 

La separación no le sentó muy bien a Fernando, desde aquel 20 de mayo de 1985 en que Luisa, su mujer le dijo que tenían que vivir en lugares separados, sin convivencia matrimonial.

Se suponía que tenía que ser así, pero no lo fue. Ese acuerdo no se llevó a cabo.

  • Me verás la cara más de una vez -advertía su marido-.

Era la espantosa frase que Luisa tenía que escuchar, sabiendo perfectamente cuál era el comportamiento de su marido.


Siempre que este llegaba a casa era como si de repente, Luisa divisara a través de la puerta a una voraz serpiente dispuesta a clavarle sus venenosos dientes.

Todo llegó a convertirse en un infierno para Luisa. La bomba había estallado hacía algún tiempo, pero el dolor estaba destruyendo poco a poco la salud de ambos, sobre todo la de Luisa.

Cuando la encontraron tumbada en el suelo de la sala de estar, descubrieron que había sido casi asfixiada con el lazo de la cortina.

Fernando había entrado en la oscuridad más profunda, cuando la sentencia del juez apagó todos sus propósitos.


Teresa Ribello

domingo, 7 de diciembre de 2025

Desde la ventana

Desde la amplia ventana del salón se divisaba el dorado parque con su aire enfurecido soplando sobre los árboles y sus ajetreadas hojas. Por el intenso viento, aquel no era un día propicio para salir a dar un paseo. Por eso, preferí quedarme en casa mirando por aquella extrovertida ventana todo lo que acontecía en el exterior.



Me sorprendió escuchar de pronto el sonido amarillo resplandeciente de las campanas, que empezó a dar una luz especial a todo el paisaje. También me sorprendió el tranquilo tranvía que cruzaba la plaza en aquel momento y que no pudo recoger a tiempo a aquel apagado hombre vestido de negro, que seguramente iría sujeto en sus pensamientos.


El cielo era de un azul brillante. Por él cruzaban algunos pájaros solitarios y en bandadas, tan bien formadas que parecían soldados de un gran ejército venido de otro mundo.


Todo transcurría normalmente, y ello parecía aumentar mi sentimiento de complacencia hacia todo lo que me rodeaba.


Teresa Ribello



domingo, 30 de noviembre de 2025

Pip vuelve a ver a Estella

En el extremo del corredor Pip se encontró a Sara Pocket. Ella se sorprendió de verlo y le indicó el camino.

Pip llamó en la puerta de la estancia donde estaba la señorita Havisham.


-Entra, Pip-.

Ella estaba en su sillón junto a la vieja mesa, con un traje antiguo y la barbilla apoyada en un bastón. Cerca de ella había una señora a la que Pip nunca había visto antes. Después descubrió que que era Estella. Estaba muy cambiada. Era más hermosa y más mujer. Más inaccesible.

A Pip le seguía atrayendo Estella igual que antes. Ella acababa de llegar de Francia y muy pronto se dirigiría a Londres. Permanecería allí durante el resto del día; por la noche regresaría al hotel y a Londres la siguiente semana.

Estella y Pip fueron a pasear por el jardín para charlar un rato. Estella recogió la cola de su vestido, que se había ensuciado un poco, puso su mano en el hombro de Pip y dieron dos o tres vueltas más al jardín.


Teresa Ribello.




domingo, 23 de noviembre de 2025

Escribamos en igualdad

- Es evidente que las mujeres publican mucho menos que los hombres -dijo Ana-.

- Sí, y además, teniendo la misma calidad de escritura unos y otros -añadió María. Las mujeres dedican más tiempo a la escritura y leen más, según un reciente estudio realizado por el Ministerio de Cultura.

- Nuestro género no ha tenido las mismas oportunidades para obtener conocimiento -comentó Ana-.

- ¿Cómo llevas tu libro? -preguntó María-.


- Bueno...tengo que hacer algunos retoques en el capítulo XI. Ayer acudí a la biblioteca y estuve toda la tarde trabajando a fondo sobre la obra. Quiero publicar pronto. Creo que tiene bastante nivel. No creo que llegue a tanto púbico como el anterior, pero pienso que tendrá bastante repercusión. Me siento satisfecha.

- La temática no puede ser mejor. Una mujer adelantada a su tiempo, tiene un accidente esquiando y durante el periodo de convalecencia escribe la novela de sus sueños, que le llevará al éxito seguro. Eso hasta lo que yo sé -dijo María-.

- Sí, está ambientada en la década de los ochenta y narra las vivencias de una mujer que ha sido maltratada por su marido durante algunos años. He querido poner énfasis en este tema porque necesitaba, a través de mi escritura ser un altavoz para el mundo.

- Son temas muy serios, que gracias a Dios están calando en la sociedad y a los que hay que hacer frente. Ojalá que las nuevas generaciones puedan tener todas las herramientas para saber actuar ante estas barbaridades. ¡Suerte con tu libro! -concluyó María.


Teresa Ribello


domingo, 16 de noviembre de 2025

¿Por qué el mar es azul?

 Parece ser que no solo el reflejo del cielo en el mar es lo que nos devuelve el color azul de su superficie. No es la razón principal.

Se debe también a las longitudes de onda de la luz. Las más cortas, como el azul o el violeta, como son dispersadas, rebotan y ese color llega a nuestros ojos.


Así, en un día nublado podemos seguir viendo el agua del mar con el característico color azul. Sobre todo, se puede apreciar mejor en las aguas profundas. Al ser más intensa la absorción, se puede ver también más intensamente ese color. Sin embargo, cerca de la costa, al encontrarnos con algas y partículas en suspensión, se ve el agua de diferente tono, como verde, turquesa o marrón.

También, en arenas blancas, se ve el agua más azul, mientras que en fondos más oscuros el agua se ve más oscura.

O sea, que la verdaderas razones serían la de la absorción de la luz por el sol y el color de la arena.


Teresa Ribello


domingo, 9 de noviembre de 2025

La tienda de antigüedades

Por mi estado económico me vi en la obligación de recomendar mi reloj a la tienda de antigüedades.

Me atreví a decir al empleado que el reloj se quedaba totalmente inmóvil junto a la pared ante todo lo que se manejara en casa de su dueño, que era muy callado, excepto cuando marcaba los cuartos y medias horas. En ese momento empezaba a decir: "Ánimo, ya queda menos".


Con esas palabras conseguí que el empleado mostrara una sonrisa, aunque un poco sarcástica.

Pero todo no quedó ahí. También le mostré dos cuadros pintados por mí.

El contenido del primer cuadro consistía en la imagen de un hombre junto a un fuego y cómo poco a poco su nariz y sus dedos se iban derritiendo y poniendo muy flexibles.

El segundo cuadro, unas manzanas cortadas a la mitad. Cada mitad tenía forma de un corazón bien definido.

El empleado me preguntó si tenía más en casa, a  lo que contesté que sí, y que eran todavía más surrealistas, como por ejemplo, un hombre con cabeza de mono analizando pájaros o un conjunto de gatos resguardándose de la lluvia, vestidos con una gabardina.

Pero es que, además le sugerí un juego de ajedrez del año 1900 a cuyas piezas les salían ramas de árboles.

El empleado, aunque un poco desconfiado, al final me dijo que le enviara el reloj y que ya se vería después.


Teresa Ribello



Todo era mentira

  El impulso le llevó a visitar a su amigo para contarle lo que le ocurría desde hacía algún tiempo. Se vio envuelto en un escándalo del que...